jueves, 11 de agosto de 2011

Amores Milenarios


Hay sonidos que sólo se escuchan en el silencio, palabras sanguinarias, frases lapidarias. Tal vez la cordura ha abandonado nuevamente el sucio y polvoriento desván de mi memoria. Estoy tratando de creer que fui alguien más en otro tiempo e intento rehacer eso de lo que no estoy seguro.

Nunca creí en lo eterno. Ni en el cielo ni en el infierno, ni mucho menos en la posibilidad de volver a la tierra con otra forma o con otro cuerpo después de que ya el camino se ha acabado. Para mí aceptar eso no tenía lógica (es un sentimiento de supervivencia, el intento del hombre por no abandonar lo conocido, el no resignarse con la realidad).

Pero ahora una duda hace temblar mi filosofía, una voz silenciosa, escondida, atrapada entre mi ser y mis temores. Estas son las frases que hacen que rompa en suspiros melancólicos por lo que atrás quedó y no estoy seguro: "si pudiera entender en qué momento se unen, se separan y se vuelven a unir las vidas de dos personas, podría explicar por qué pudiendo estar cerca, estamos ahora tan lejos.......creo que te conozco de vidas pasadas... estoy seguro que tanta necesidad de alejarme y acercarme de ti debe tener raíces milenarias... "

Algunos dirán que son palabras bonitas, pero a mí me sudan las manos de solo pensarlo, me confunde porque si bien es un honor también me deja sin argumentos. Amores milenarios, destinos unidos a través del tiempo y la distancia. Si así fuere no tendría más para decir que: “cuando sea polvo mezclado en la tierra igual te amaré”

Y si es verdad podría entender por qué la canción “Somewhere only we know” me recuerda un lugar cálido y por qué caminar descalzo es uno de mis placeres más privados. También entendería mi manía de viajar en el tiempo, mis sensaciones inexplicables cuando pienso en el pasado y la costumbre de bendecir a la vida. ¿Será porque en el fondo tengo por sabido que esto no acaba aquí?